Cerámica chorotega, patrimonio vivo de Guanacaste
San José, julio de 2020. La tradición de elaborar piezas cerámicas de influencia chorotega, se considera un patrimonio vivo. Desde las poblaciones originarias de Guanacaste, a las de hoy, la alfarería se mantiene vigente en localidades como Guaitil de Santa Cruz, Las Pozas y San Vicente de Nicoya; Puerto San Pablo y Santa Rita, en Nandayure, así como en Tempatal de La Cruz.
De acuerdo con Iria Salas, investigadora, artista ceramista y docente de la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Costa Rica, la alfarería posiblemente comenzó a ser manufacturada en Guanacaste hace cuatro mil años. Las evidencias más antiguas provienen de la cordillera de Tilarán. Respecto a la producción de cerámica chorotega actual, data de principios del siglo XX, cuando los hombres colaboraban en la obtención y preparación de materias primas, mientras las mujeres desarrollaban la actividad y transmitían sus conocimientos a las nuevas generaciones.
Las materias primas para la elaboración de la cerámica provienen de la naturaleza. “Por mucho tiempo el barro se extrajo de un terreno de propiedad privada; ahora sus dueños lo cerraron y lo están vendiendo a los artesanos. Otro material muy usado para mezclar con el barro, es la arena de iguana, esta se extrae de los ríos cercanos y es una fuente gratuita”, explicó Salas.
Los colores característicos de las piezas chorotegas: rojo, café, crema y naranja, se obtienen del curiol, que es “una tierra arcillosa también, pero tiene óxidos metálicos, como altos porcentajes de hierro y manganeso, entre otros, los cuales dan el color. Se encuentra en vetas, hilos de tierra coloreada que se ensanchan en algunas ubicaciones y se pueden extraer. Si están muy finas, es muy difícil, por eso se necesita encontrar esas vetas gruesas”, explicó la artista.
Otro material importante es la leña que se utiliza como combustible para el horneado, lo que potencia la necesidad de reforestar constantemente la zona. “El horneo se hace de forma muy primitiva, con hornos hechos de arcilla donde se pone gran cantidad de leña. Una vez a la temperatura deseada, se ponen las piezas cerámicas bien secas a ‘quemar’, término que usan en la región para referirse al proceso de horneado de las piezas”, apuntó la ceramista Salas.
Visite virtualmente el Ecomuseo de la Cerámica Chorotega: http://ecomuseosanvicente.org/
Oficina de Prensa y Comunicación | Ministerio de Cultura y Juventud | Producción Gabriela Guerra | 22-07-2020